miércoles, 13 de marzo de 2013

Entrevista con el vocalista de Goody Alien

 Los ilicitanos Goody Alien, uno de los estandartes del rock independiente en la provincia, se han sumado a la iniciativa del crowfunding para financiar su último trabajo discográfico “You belong here”. Ha sido tanto el éxito y tan rápida y masiva la respuesta de su público, que en menos de una semana han completado su objetivo de llegar a los 1.500 euros para financiar el proyecto. No obstante todavía sigue abierta la posibilidad de participar como mecenas en la interesante iniciativa a través de la web: http://www.verkami.com/locale/en/projects/4616-you-belong-here
Gran parte del secreto del éxito de Goody Alien en este proyecto está en los “premios” que ofrecen a los mecenas, ya que por precios muy asequibles puedes adquirir el nuevo disco y también merchandaising como chapas o camisetas.
El vocalista de la banda, Puche, nos explicaba el por qué del nombre de su nuevo álbum: “El título es una frase extraída de las letras de una canción del disco, "UNCHARTED", que le escribí a mi pequeño Manuel cuando nació y que define un poco las sensaciones que vives en esos preciosos momentos e intenta transmitir lo mucho que te queda por compartir con el y él contigo... y lo importante que es hacerle saber que... 'este es su sitio' y que te tiene para siempre.”
Tras muchos años trabajando en su sonido, Goody Alien tiene muy claro cuál es la esencia de su sonido, en donde lo más importante es dar con una buena melodía: “hemos pasado muchos momentos en los que nos apetecía experimentar con sonidos y nuevos aparatos y casi sin darnos cuenta hemos vuelto al "origen" que, fuera de etiquetas y estilos 'precocinados', no es otro que el rock y el pop. Siempre lo hemos dicho, las guitarras son importantes pero son más importantes unas buenas melodías.”
“You belong here” se ha grabado con Óscar Martínez (componente de Radio Clash y Disidencia) , en los Estudios Sonica de Novelda, gracias a lo que han logrado un sonido “más crudo y directo”. Para este proceso además han contado con la colaboración de Daniel Gilabert (teclista de The Grave Yatch Club y Guaraná). El disco se grabó en tan solo dos días y, según Puche, “fue una experiencia brutal y al mismo tiempo genial para la banda... porque grabamos en 'directo' en el estudio, 8 canciones en prácticamente 6 horas. No obstante, los arreglos, guitarras, pianos, voces, etc. se fueron grabando poco a poco en los siguientes meses.
En este nuevo disco una de las novedades es la incorporación de Juanma, el nuevo bajista, a los coros y voces, “es algo que en Goody Alien echábamos en falta de forma más presencial, porque siempre había sido un "instrumento" secundario, y en este disco cobran mucho más protagonismo gracias a Juanma principalmente y a Antonio que también ha realizado coros en algunas canciones.”
En esta nueva creación de Goody Alien nada es casual, y esto puede ejemplificarse incluso con el diseño gráfico del disco. “El autor de esta pequeña obra maestra para nosotros es Carlos Ramos, diseñador de Madrid, muy fan de la banda desde hace tiempo y el cual ya nos diseñó el anterior disco "The Longest Night in Sundance". A Carlos le enviamos las canciones para saber si quería volver a colaborar con nosotros y tardó menos de un día en decir que sí, porque el disco le encantó. Le enviamos las letras y le dimos libertad para escoger la temática... casualmente el también había sido padre recientemente y fue clara la decisión y la elección, "Uncharted". De aquí arrancó el proceso creativo que ha plasmado en el disco, el cual está basado en una teoría sobre el origen de la materia que John Dalton realizó en el siglo XIX (si, Dalton es el que da nombre al Daltonismo porque también lo descubrió) usando los símbolos que representan el origen de todo y a los cuales se le han asignado cada una de las canciones que componen el disco, generando una especie de diagrama o 'átomo musical' en el interior... además para no acabar la fiesta ha usado un alfabeto chino compuesto de 64 hexagramas (I CHING) para definir con cada símbolo a cada una de las canciones... también hay alguna cosa más "escondida" en el diseño.... en fin como puedes ver, el arte gráfico para nosotros es de 10. Por cierto, la portada es un Liposoma...”
La elección del crowfunding para sacar adelante el proyecto nació de las circunstancias económicas y, pese a las posibilidades que ofrece Internet, la banda deseaba plasmar su trabajo en un formato físico, como es el cd. Pues en realidad fue todo muy rápido y no llegamos a hacer seguimiento de nadie en particular. Y con el resultado de esta iniciativa, como cabría esperar, se muestran más que satisfechos: “Nuestra experiencia ha sido genial, no podemos decir otra cosa, teníamos 40 días para conseguir el objetivo fijado y en tan sólo 5 días lo hemos logrado. Nos hemos dado cuenta de que es un medio increíble para llegar a tus fans de siempre o a gente que no te conocía de la forma mas directa posible y sincera y, sobre todo, para hacerles partícipes de verdad de tu proyecto, que creo que es lo verdaderamente innovador.”
Y precisamente, Puche apuesta por la continuidad de formatos tradicionales como el disco o el libro, a pesar de que su forma de difusión pueda ser a través de Internet: “ Realmente el concepto digital no tiene vuelta atrás y lo va a invadir todo, pero tampoco tenía vuelta atrás la desaparición del vinilo y mira lo que está pasando. En este mundo actual demasiado virtual, creo que tiene un hueco para siempre el pequeño mundo real que nos gusta a muchos de nosotros, como el leer un libro y pasar sus páginas o el gesto de abrir un disco y descubrir su interior... pequeños placeres que creo no desaparecerán.”
En el mes de abril la banda comenzará a presentar su disco en directo y, aunque todavía quedan fechas por confirmar, los seguidores podrán escucharlos el 12 de abril en el “8 copas” de Altea y el 18 de mayo en “Cure”, Alicante.

domingo, 10 de marzo de 2013

Leer poco y bien

 Hace cuarenta años de María Van Rysselberghe podría ser considerada una narración lírica, pues su estilo cuidado acerca esta novela corta a la poesía en el sentido más esencial y delicado.
La lectura de este librito podría compararse a comerse el último bombón de una caja. Invita a releer cada página, cada párrafo, cada palabra, para paladear la belleza de sus sugestiones. 
“Ya ves, ahora los libros somos nosotros”, afirmaba él apartándolos con un gesto exagerado, como si nuestra ternura los hubiese dejado atrás y fueran ya un estorbo. Pero se recomponía enseguida, pues era consciente de que los libros garantizaban nuestra cordura: “Mejor no ser ingratos: incorporémoslos a nuestra alegría”. 
La historia es sencilla, pero también real. La escritora confiesa un amor auténtico, tal vez el más real que ha sentido, describe ese amor lejano en el tiempo y presente en su alma en cada día de su vida posterior. Fue un amor breve, que se sabía caduco, un encuentro adúltero entre ella y Hubert, bajo quien se esconde Émile Verhaeren. 
La pareja pasa unos días en una playa del norte, en la casa de la duna, y disfrutan de lo cotidiano y de lo sorprendente de cómo se reencuentran el uno con el otro cada mañana. Saborean esa soledad y sus juegos intelectuales interrumpidos de cuando en cuando por visitas que les recuerdan que esta unión está condenada a perecer, que su tiempo será breve, como el del propio libro. Y, sin embargo, nos llevarán a la conclusión de que ya nadie, ni el tiempo, les arrebatará lo vivido.
Lectura breve, de unas ochenta páginas, para leer despacio y con la sensibilidad y el ánimo libre de prejuicios. Entregarse a esta lectura, es entregarse a una "escritora secreta" y sincera.